top of page
  • Pimpampelis

Pelis pequeñas para grandes proyectos. Cenas Adivina.


Apenas paso por aquí para enseñaros trabajos, aunque haberlos, haylos. Y es que casi siempre son piezas privadas con el material de archivo que las familias guardan en la privacidad de sus casas. Sí, redundante, he dicho privado dos veces, pero es que es doblemente privado, qué le vamos a hacer.

Aunque este primer año de vida de Pimpampelis he hecho cosas preciosas y he disfrutado con clientes estupendos, me temo que tendréis que fiaros de mi palabra desinteresada cuando os digo que se pueden hacer maravillas con lo que guardáis abandonado en vuestros archivos digitales.

Y hacer labor comercial así en plan acto de fe, porque yo digo lo buena que soy y lo bien que lo hago, entiendan ustedes que tiene su dificultad. Más aún cuando mi misión consiste en crear un vínculo de confianza, porque entiendo que me dais un trocito de vuestra vida y esperáis de vuelta eso mismo en el mejor marco posible, con respeto y con fidelidad a quiénes sois y a la verdad de lo que habéis vivido.

Suena difícil, y lo es. Pero se me da bien hacer esto, qué queréis que os diga. Para eso me embarqué en este proyecto y no me ha decepcionado ni una de las sonrisas y los abrazos que me he encontrado al entregar una peli a sus legítimos dueños y protagonistas. Y eso no paga facturas, pero antes tampoco pagaba demasiadas y en mi trabajo no me sonreían ni la cuarta parte, la verdad sea dicha.

Grabando en mumspace.club. Foto de Victoria Peñafiel

©Victoria Peñafiel

También hago cosas chulas que se pueden difundir a los cuatro vientos, pero prefiero centrar los vídeos que enseño en la web en los servicios que ofrezco a familias, por lo que las piezas de eventos o los experimentos locos los podéis ver directamente en mi canal de Vimeo y echar el rato cotilleando.

Y por eso mis colaboraciones con Silvia Moreno, aka Cenas Adivina, para la que he realizado piezas pequeñitas en cenas y eventos varios, no ha visto la luz aún por estos lares. Colaboración que resumo, porque podría echar la vida aquí explicando qué ha significado poner a Silvia en mi vida de emprendedora solitaria.

Sí, ya, resumiendo: Yo un día me animo a ir a una cena que ha organizado en su casa sobre marketing digital con las chicas de Marketing Expresso. Ella es un sol de primavera y organiza cenas. Y necesita vídeos. Yo hago vídeos. Y necesito cenas, porque yo, salir de casa, es algo que sobrevaloraba hasta que dejé de hacer. Así que nos propusimos enseñar juntas los encuentros tan especiales que organiza para que el mundo se entere. Entre medias he conocido a gente estupenda, he aprendido a ponerme en valor y a moverme de mi silla para ir al encuentro de las cosas que merecen que una se levante. Gracias Silvia, mi celulitis física y mental te lo agradece.

Y entonces llega la #fiestadivina2018 y Silvia necesita lo que muchos de vosotros ¡Una peli bonita made in Pimpampelis! Porque resumir un año de su proyecto no es fácil, porque expresar qué es y para qué existe @cenasadivina es complicado si no lo has vivido, y porque iba a montar un fiestón donde quería proyectarla y dar protagonismo a tooodos sus protagonistas.

Así que manos a la obra, recogí sus necesidades e inquietudes y le propuse una idea, un guión y una realización ¿La premisa? Si tan difícil es explicar la experiencia de sus cenas a quien no las conoce, démosle voz a los que sí lo han vivido. Y hay que emplear (como en cualquiera de vuestros casos) el material del que disponemos, qué remedio. Así que me pasó una selección de las cientos de fotos magníficas (fruto de otra colaboración con varias fotógrafas geniales de las que hablaré largo y tendido otro día) que ha acumulado estos meses alrededor de varios grupos temáticos: llegadas, comida, risas, momentos especiales, los expertos, la tertulia, familia, las copas, el grupo, despedidas…

Proyección del vídeo para Cenas Adivina. Foto de Loren Photography.

©Loren_Photography

Y como hago en muchas ocasiones, si hay que grabar, se graba. Le propuse a Silvia cerrar el montaje de archivo con un pequeño montaje del mismo día de la fiesta, montarlo in situ con imágenes del principio de la fiesta para darle un chute de movimiento y energía a la pieza que íbamos a proyectar ante los invitados, un ratito después.

Para mí era clave terminar la pieza de esta manera, con lo que de verdad importa en este proyecto: la imagen de la gente que forma parte del mismo, la gente que iba a ver la proyección, que acudió a su fiesta y esperaba conocer el nuevo calendario de cenas para este curso. Con sus abrazos, sus risas, su calor humano. Y porque todo el mundo estaba guapo y estupendo, y qué subidón da verte sonriente y feliz en una pantalla, más cuando sabes que vas estupenda de la muerte.

Silvia quiso que fuera una sorpresa absoluta incluso para ella, así que allí me ven ustedes con mi usb en mano (temblorosa), tras haberme hecho un sprint de edición en media hora escasa, sentadita en un rincón con mi portatil y pensando “ahora la gente se duerme y me daré cuenta de que he hecho una peli iraní de cuatro horas. Aunque lo superaré, porque yo lo supero todo” .

Abrazo con Silvia de Cenas Adivina. Foto de Loren Photography.

©Loren_Photography

Pero todo lo que tenía que salir bien, salió bien. Que yo sepa nadie se durmió. La gente rió y lloró. Y cuando eso pasa, sé que lo he clavado. Y es que las pelis no son mías, son vuestras. Para vuestro archivo audiovisual, para vuestra memoria familiar. Y Silvia tiene para siempre en su archivo un pedacito del proyecto que le ha costado sudor y lágrimas crear y mantener. Como digo siempre, una peli que poder ponerte en bucle cuando necesites llorar o reír. Y recordar lo importante.

¿Qué os parece el resultado?

85 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page